Aransbur afirma que la Ley de Dependencia hace «invisible» la discapacidad auditiva

La Asociación de Familias de Personas Sordas de Burgos (Aransbur) denuncia que la Ley de Dependencia “invisibiliza” a muchas discapacidades, entre ellas la discapacidad auditiva. José Luis Arlanzón, presidente de Aransbur, asegura que la mayor parte de los niños que nacen sordos no llegan a estar reconocidos en el grado 3 de dependencia, el más elevado, por lo que no reciben la atención, los recursos, ni las prestaciones que requerirían para llevar una vida lo más normalizada posible. Y lo mismo ocurre con los adultos, cuya dependencia siempre se valora a la baja.

Arlanzón insiste en que las personas sordas o con una deficiencia auditiva no requieren de atención permanente para su día a día, pero eso no significa que no necesiten de un apoyo externo. Una persona que les ayude a comprender qué es lo que ocurre a su alrededor, un recurso que les facilite la relación con la sociedad, un aparato que minimice los efectos de su discapacidad… Y es que estamos hablando de una de las discapacidades que más afectan al ser humano, por la “perversidad que conlleva”, por lo que supone de aislamiento social, de dificultades en la comunicación o en el acceso a la información.

Así que si no se hace una valoración correcta de su dependencia, los recursos a los que tienen derecho a acceder no son suficientes. Pero en Aransbur no sólo detectan este problema. La actual generación de personas sordas o con deficiencias auditivas ha conseguido superar algunos problemas “históricos” del colectivo, reconoce Arlanzón, gracias a el desarrollo de los implantes cocleares, los programas de intervención temprana o el reconocimiento de la lengua de signos como una lengua oficial en las administraciones, por poner tres ejemplos.

Sin embargo, cuando no se dispone de los recursos suficientes para garantizar esos derechos, se convierten en “agua de borrajas”, que es lo que ocurre en estos momentos. El presidente de Aransabur recuerda que los implantes bilaterales para niños han pasado a ser unilaterales, que los programas de apoyo y la intervención temprana corren a cargo de los padres, que el acceso a lengua de signos no está garantizado en todos los estratos de la administración y que las ayudas y prestaciones también se han reducido. Todo ello afecta de manera directa a la inserción social del colectivo, materia que acaban soportando padres y asociaciones.

Desmantelamiento
Estas quejas y reivindicaciones son las que han escuchado esta mañana varios representantes del PSOE, que se han acercado hasta la sede de Aransbur, en el barrio de Fuentecillas, para reunirse con los representantes de la asociación. Luis Tudanca, el secretario del PSOE en Castilla y León, ha encabezado la comitiva, en la que han participado también Esther Peña (secretaria provincial) y Ander Gil (candidato al Senado). Tudanca ha criticado el “desmantelamiento” de la Ley de la Dependencia, cada vez con menos financiación, menos usuarios y más copago de servicios.

Los recortes en servicios públicos y sociales planteados por los gobiernos del Partido Popular, ha insistido Tudanca, han “lastrado y debilitado” una de las grandes “fortalezas” de la sociedad burgalesa, su tejido social. Administraciones y asociaciones deben trabajar conjuntamente por una sociedad más justa, atendiendo como se merecen a las personas dependientes o con discapacidad. Sin embargo, los recortes sistemáticos en ayudas económicas y programas de atención lo único que han conseguido es que la prestación de servicios dependa de las asociaciones y de los recursos que tengan afectados y sus familias, asegura el socialista.

Fuente: burgosconecta.es

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